¿Qué es la Medicina Floral?

El resultado de las investigaciones con plantas, sostenida por la cosmovisión cristiana asumida por Edward Bach, son los dos pilares sobre los que se sustenta la denominada ‘Medicina Floral’. Bach amplió la medicina ‘homeopática’ modificando entre otros su punto de vista respecto al trabajo con animales, y rechazó de plano la medicina actual, conocida como ‘alopática’, es decir que actúa desde fuera del sufriente, en lugar de colaborar con sus fuerzas vitales para que sea él quien logre la potestad de decidir y poder curarse.

En su texto “Cúrense a ustedes mismos” deja en claro el planteo general y los riesgos que implica seguir a la actual práctica de la medicina científica, así como una descripción del camino a seguir para evitar todo tipo de dependencia referida a instituciones, saberes establecidos, razones culturales y jerarquías personales, con el propósito de desbrozar el camino del hombre en su paso hacia la armonía consigo y definitiva liberación de su persona. De lo contrario, de no poder lograr dicha armonía y ser presa de los poderes establecidos que reemplazan sus fuerzas vitales, el individuo humano no podría lograr evitar las causas que lo enferman.
En suma, lo comprendido como ‘medicina floral’ es un planteo que entiende al ser humano en términos totalizantes, y a los componentes de la vida, tales como la sociedad, las costumbres, los lazos familiares, culturales y civilizatorios, a las prácticas que atentan contra el pleno desarrollo de la individualidad y bloquean su propio poder-hacer, como a los responsables de la enfermedad sobre la tierra.
Por tanto, la MF procurará invertir el estado de cosas actual, siguiendo las recomendaciones del dr. Bach con el fin de colaborar en pro de que el núcleo de la relación terapéutica, es decir el paciente, vuelva a ocupar el lugar del que fue desplazado, confiando en que una vez liberadas las energías inmanentes en el sufriente, él alcanzará la armonía que lo conduzca a restablecer el equilibrio que le restituya la salud.